El ciclismo de montaña es una actividad que se debe practicar con todas las condiciones de seguridad. Es siempre indispensable salir en BTT con seguridad. Esto significa planificar la salida al medio natural con responsabilidad, siempre contando con un equipamiento adecuado y una actitud prudente.
La planificación de la salida supone varios puntos a tener en cuenta, entre los que destacan la elección de la ruta, la previsión del tiempo, los acompañantes y el equipamiento deportivo de ciclismo para disfrutar de una jornada segura al aire libre.
Elegir la ruta ideal en el ciclismo de montaña conlleva meditar sobre el tipo de dificultad que se esté dispuesto a afrontar. Para ello, resulta aconsejable estudiar las distintas rutas BTT. Antes de su elección, conviene conocer las capacidades físicas y técnicas con el fin de saber qué reto se podría asumir. También es recomendable que las rutas se realicen en las primeras horas de la mañana, para disponer de tiempo suficiente y terminar la actividad antes de la caída del sol.
Otro aspecto a consultar es la previsión meteorológica. Se ha de prever la serie de medidas a tomar en el caso de lluvia o condiciones climatológicas adversas que pudieran entorpecer los descensos de montaña. En cuanto a la compañía, la recomendación habitual es evitar salir en solitario o, si es el caso, avisar de la ruta que se llegará a cabo y de la hora prevista de llegada.
El equipamiento debe incluir protección de todo tipo, tales como guantes, bloqueador solar, rodilleras, coderas y gafas para el sol. La ropa debe consistir en tejidos que protejan de frío, lluvia o calor, y técnicos, elásticos y ajustados.
Finalmente, es indispensable llevar en la bicicleta un kit de reparaciones con corta cadenas, repuesto de cambio trasero, aceite, sirga y bomba de aire, así como botiquín, agua, comida y móvil.